La disputa por el poder

En México la sucesión presidencial ha iniciado. Aún faltan dos años para que el actual mandatario Felipe Calderón Hinojosa deje el poder, pero desde ya se perfilan personas y estrategias en la disputa por el país.
El Estado de México es parte estratégica en esta disputa, no sólo por su importancia económica y poblacional sino porque su Gobernador, el priísta Enirque Peña Nieto, se ha convertido en una figura emblemática para la sucesión.

miércoles, 18 de agosto de 2010

EL VERDADERO PODER DE PEÑA NIETO EN EDOMEX





Les comparto un texto elaborado por Minerva Ordoñez que trabajamos para tratar de entender el verdadero poder de Peña Nieto y el PRI en el Estado de México.
Contrario a lo que se puede pensar, el Partido Revolucionario Institucional no creció con la llegada del gobernador Enrique Peña Nieto.
Peña Nieto recibió de manos de Arturo Montiel un Estado de México en el que su partido contaba con mayoría en la cámara local, gobernaba a más de la mitad de los municipios mexiquenses y contaba con mayor número de diputados federales mexiquenses que los que tenían los partidos de oposición.
El político que parecía ser el más carismático, la cara del nuevo PRI y líder natural en torno al cual se empezaban a aglutinar los priistas, golpeados por la transición democrática del 2000 y por el escándalo de desvío de recursos del erario por parte del ex gobernador Arturo Montiel, recibió un fuerte golpe en su primer año de gobierno.
LA CAÍDA DEL PRI EN LAS CÁMARAS EN LA ELECCIÓN DE 2006
Para 2003 el PRI participa por primera vez coaligado con otro partido político, aliados desde entonces, contiende junto al Partido Verde en los 45 distritos locales y en los 124 municipios del Estado de México. Obtienen en estas elecciones 68 alcaldías y 28 diputados en conjunto, el acuerdo de coalición le otorga al PVEM 4 de esos diputados.
Así recibió peña el estado, con mayoría simple en el congreso local y más de la mitad de los municipios con gobiernos priistas. Para los procesos electorales de 2006 el panorama se complica para el gobernador. Su partido pierde la mayoría en el congreso local, el PAN obtiene 20 curules al igual que el PRD, el PRI sólo alcanza 19. Pero estaban preparados para un escenario de esta magnitud. En la lista del Partido Verde inscribieron a dos priistas que, llegado el momento, se registraron en el Grupo Parlamentario del PRI. Así el Revolucionario Institucional tenía mayoría simple otra vez, una mayoría no obtenida en las urnas, pero mayoría al fin.
La historia de la Cámara de Diputados federal fue distinta, no hubo nada que hacer. De 23 diputados federales con los que contaba Peña, pasa a tener sólo 9 diputados mexiquenses por su partido.
El gran ganador de la elección federal de 2006 fue el Partido de la Revolución Democrática, de 12 diputados perredistas en la LIX Legislatura logra obtener 23 curules. De igual forma logra ingresar a dos miembros de su partido en el Senado.
El Partido Acción Nacional sólo pierde un diputado federal para quedar en esa LX Legislatura con 18 diputados. Sin embargo los panistas mexiquenses pierden posición en el Senado de la República, de dos senadores pasan a obtener solo uno.
Cuando inicia su gestión como gobernador Enrique Peña contaba con un priista mexiquense en el Senado, pero pierde ese espacio en las elecciones de 2006. Los priistas mexiquenses continuaban sin recuperar espacios en la cámara alta.
La presencia del tricolor en los ayuntamientos también disminuyó ostensiblemente. De 68 alcaldías ganadas por la coalición PRI-PVEM en los procesos electorales de 2003, disminuyen a 55 ayuntamientos ganados. Parece menor, pero el hecho es que ya no contaban con más de la mitad de alcaldías, esa mitad más uno que permite realizar reformas constitucionales a modo.
Ante tales resultados la estrategia se tornó más agresiva, los operadores políticos de Peña vieron con tiempo la amenaza que representaba el crecimiento de los partidos de oposición, los peligros ir con un solo aliado, el error de pensar que con tener un líder carismático estaba todo ganado.
Tenían que consolidar alianzas, firmar coaliciones y cuando las reformas al Código Electoral de la entidad lo permitieron, generar también candidaturas comunes para conservar el poder. Los gastos en materia de publicidad que ascienden a miles de millones de pesos, eran necesarios para reposicionarse.
La imagen de Peña fue expuesta al máximo, apareció sonriente y sereno en las campañas para publicitar los logros de su gobierno y el cumplimiento de los denominados Compromisos. Esto duró hasta que se formuló la reforma electoral que establecía la prohibición de exhibir publicidad gubernamental durante las campañas, regular la intervención de los funcionarios públicos en las mismas e impedir la promoción de la imagen personal en la propaganda gubernamental.
La solución fue simple. Como parte de los contratos de publicidad con Televisa se convirtieron en imágenes del Gobierno del Estado México actrices del elenco de esta televisora. Primero fue Angélica Rivera, quien al convertirse en pareja sentimental del gobernador deja esta actividad y es sustituida por la actriz y cantante Lucero.

LA RECUPERACIÓN
Las medidas tomadas fueron efectivas y en las elecciones de 2009 se vieron los resultados. El Partido Revolucionario Institucional obtuvo la mayoría absoluta en el congreso local, lograron al triunfo en 97alcaldías y ahora el gobernador Peña Nieto tenía casi 50 diputados federales.
Además de su aliado desde 2003, Partido Verde se unieron al PRI el partido Nueva Alianza, el Social Demócrata y el partido político local Futuro Democrático. Las planillas comunes postuladas por el PRI y sus nuevos aliados obtuvieron el triunfo en gran cantidad de municipios que en número representan más de las dos terceras partes del total.
Los partidos Acción Nacional y el de la Revolución Democrática tuvieron una caída sin precedentes. Habían logrado mantener desde 2003 el mismo número de alcaldías. El PAN perdió la mitad de los municipios que gobernaba y Toluca y el PRD únicamente conservó una cuarta parte de las alcaldías. La caída electoral represento para ambos partidos la pérdida de bastiones como Toluca y Naucalpan en la caso del blanquizul y Nezahualcóyotl y Texcoco para el PRD.
La legislatura local estaba ahora bajo el control priista. Lograron duplicar el número de legisladores y alcanzaron 40 diputados. Los resultados para la elección federal fueron igual de avasalladores. De 9 diputados federales priistas mexiquenses en 2006 pasaron a obtener 45 curules. La presencia de los priistas del Estado de México se puso de manifiesto en la LXI Legislatura, no solo numéricamente sino también en el reparto de comisiones. Ahora personajes cercanos a Enrique Peña presiden comisiones importantes, tan importantes como la de Justicia, de Presupuesto y Cuenta Pública y la de Comunicaciones.
El objetivo se cumplió, lograron superar los resultados adversos de la primera elección que le tocó a Enrique Peña ya como gobernador. Se recuperaron y ahora si el gobernador esta blindado en su camino a los Pinos, tiene más de 85 legisladores locales y federales y 97 alcaldes que lo arropan y que le abrirán camino en sus aspiraciones presidenciales de 2012.

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